Clara y Eloy ya están aprovechando al máximo su experiencia en Roma para realizar su FCT en una clínica dental italiana. Os dejamos sus primeras impresiones:
Nuestra estancia
en Italia al principio fue un periodo de adaptación sobre todo por empezar a
ubicarnos un poco las calles y empezar a tener mas seguridad a la hora de
salir. Personalmente lo que mas nos costó y nos sigue costando es entender el italiano,
pero sobre todo saber responderles porque entendemos la idea de lo que nos dicen
porque al ser lenguas que provienen del latín tanto el español como el italiano
tienen palabras bastantes similares, eso y que para entendernos con la gente a
veces gesticulamos, pero no tenemos tanto vocabulario ni fluidez como para
responder.
El personal de la clínica odontológica es increíble tanto en lo
personal como en lo profesional, con cada uno de los que hemos estado hemos
aprendido cosas nuevas o una forma distinta de hacer las cosas, porque al final
va de aprender y quedarte con lo mejor de cada una de las personas que tuvieron
la paciencia y dedicación de enseñarte. Hemos de hacer una dedicación especial
a Gisella, a su hermana Mónica y a Mario que son las personas con las que mas
tiempo hemos pasado y las que mas han dedicado su tiempo a enseñarnos todo lo
que saben, además, no solo nos han ayudado en el aprendizaje sobre todo lo que
se hace en una clínica dental, sino que también nos han ayudado en problemas de
la vida cotidiana que podamos haber tenido ya sean dudas o algún problema de la
casa, además si queríamos visitar algún sitio nos daban indicaciones de donde
ir y que cosas podríamos hacer, sin duda además de darnos la oportunidad de
aprender en nuestras prácticas son unas personas super amables.
Clara ha tenido
la oportunidad de visitar la increíble Venecia y está segura de que si alguna
vez vuelve a Italia es un lugar que volvería a ver porque se enamoró,
claramente el viaje no fue perfecto hubo dificultades, pero al final se superan
y eso es lo importante porque ya el hecho de salir de tu país, de tu casa, de
tu zona de confort es una dificultad, pero resulta que al final te empieza a
gustar eso de conocer y moverte por sitios desconocidos. Hemos de decir que sin
Google maps ya nos hubiéramos perdido unas cuantas veces, pero es el mejor
invento que existe cuando vas a un país que no conoces. Lo que mas disfrutamos
de Roma es salir solos, con música en los auriculares, sin rumbo e ir dejándote
llevar por las calles porque descubres lugares y además ves las costumbres y
detalles de los italianos, esto fue en parte una de las cosas que nos costaba
al principio, pues estábamos bastante desorientados, pero nada que no se
arregle dando unas cuantas vueltas para conocer la zona, una de las cosas que
nos llama la atención de Roma es el metro, cuando hablamos de metro nos
imaginábamos algo similar al metro de Madrid, pero no se parece mucho la
verdad, la ciudad está bastante mal comunicada en ese aspecto pero parece ser
que por el momento no han mejorado las líneas de metro demasiado porque parece
que hay ruinas bajo la ciudad.
Juntos visitamos
el coliseo romano, la fontana di Trevi y el vaticano, íbamos a visitarlo un día
antes, pero la lluvia no nos lo permitió, aunque fuésemos al día siguiente fue
una aventura en la que Roma nos acompaño con una lluvia que nos dejo empapados
hasta los zapatos, pero al final es una anécdota mas para contar.
Hemos de decir
que la experiencia Erasmus al principio puede dar algo de miedo, pero nos
alegramos de haber salido de nuestra zona de confort, ya que el estar viviendo
con tu familia en un país que conoces y de repente tengas la oportunidad de
visitar otro país con otras costumbres, otra cultura y otra manera de vivir es
una experiencia que ojalá pudiese tener todo el mundo, porque te ayuda a ser
más independiente y resolutivo en los problemas que se te presenten.